Descripción:   Conocer las distintas competencias de los auditores. Analizar las fases y tipos de las auditorías. Describir los beneficios de la implantación de un SGA. Identificar las diferencias entre ISO 14004 e ISO 14001. Analizar la norma ISO 19011 y los documentos a revisar antes de llevar a cabo una auditoría. Identificar los pasos a seguir en el inicio de una auditoría.   Fundamentación:   Con este curso de auditor de medio ambiente se podrán adquirir las competencias necesarias para poder perfilar y analizar la figura del auditor de calidad ambiental. Como proceso que forma parte de la política de empresa y de forma voluntaria, éstas pueden llevar a cabo auditorías ambientales que proporcionen a la dirección la información necesaria para desarrollar actividades respetuosas con el medio ambiente y determinen el cumplimiento de las normas de gestión medioambiental. Una empresa, por medio de auditorías de medio ambiente busca identificar y minimizar los impactos en el medio que sus propias actividades generan. Así evalua la eficacia del Sistema de Gestión Ambiental. El proceso de auditoría se divide en varios subapartados como pueden ser los objetivos, las metas y el programa. Su principal objetivo será determinar los problemas que podemos encontrarnos en la empresa y saber también cuáles son los puntos fuertes de nuestra empresa. Qué es una auditoría ambiental Según la Norma ISO 14001:2004, se puede definir auditoría como un “proceso sistemático, independiente y documentado para obtener evidencias de la auditoría, y evaluarlas de manera objetiva con el fin de determinar la extensión en que se cumplen los criterios de auditoría”. En este curso definimos la auditoría como el examen, por parte de personas neutrales, del cumplimiento de una determinada norma o procedimiento. Las auditorías ambientales son auditorías realizadas sobre el cumplimiento de normas de gestión medioambiental. La auditoría es una actividad de análisis que recaba información y la evalúa para determinar posibles errores, estableciendo pautas para corregirlos. De ningún modo, se trata de un proceso técnico. El au­ditado tiene que ver siempre la parte positiva de recibir información sobre el funcionamiento de la empresa. La auditoría ambiental tampoco debe convertirse en una simple inspección rutinaria. En su desarrollo, no participan exclusivamente la persona o equipo auditor, sino los propios auditados. El éxito y la eficacia de una auditoría dependen de la cooperación de todas las partes involucradas. Objetivos de una auditoría ambiental La auditoría ambiental debe proporcionar a la dirección de la organización la información suficiente para controlar, planificar y revisar las actividades que puedan ocasionar efectos sobre el medio ambiente. Del mismo modo, permite evaluar la adecuación de la política ambiental a la empresa. Los objetivos de una auditoría ambiental son muy amplios y diversos. Dependen, en gran medida, de las especificaciones de la actividad, la empresa auditada y el entorno en que se ubica. Aun así, existen unos objetivos genéricos que deben tenerse presentes en, prácticamente, todas las auditorías. Como consecuencia, se podría decir que las auditorías ambientales se realizan con la finalidad de determinar: La adecuación del sistema de gestión ambiental de la organización a una normativa de referencia específica o estándar. La conformidad de las actuaciones de la organización respecto a la reglamentación medioambiental La eficacia de las actividades que constituyen el sistema ambiental de la organización, y de las medidas preventivas y/o correctivas adoptadas. Características generales de la auditoría ambiental Las auditorías se realizarán, conforme a lo indicado en el programa de auditorías, una vez implantado el sistema de gestión ambiental. Para realizar la auditoría es imprescindible contar con personal preparado para llevarla a cabo. Dicho equipo debe poseer la competencia necesaria para alcanzar los objetivos deseados, teniendo en cuenta la necesidad de imparcialidad e independencia del equipo auditor respecto a las actividades a auditar. Debe establecerse, previamente, el objetivo, alcance y criterios empleados para determinar la conformidad del sistema de gestión ambiental a auditar. Antes de iniciar la auditoría se debe realizar el acopio y revisión de la documentación pertinente del sistema de gestión ambiental. Se incluyen los registros e informes de auditorías previas. Es necesario que la empresa auditada posea el «Procedimiento para la Realización de Auditorías Ambientales». Tiene que estar redactado y aprobado con anterioridad a la auditoría. Es decir, permitir seguir una pauta de actuación al personal auditor, señalando sus competencias y limitaciones. Así mismo, deberán establecerse los oportunos contactos, mediante reuniones previas y de apertura, entre el equipo auditor y el auditado. En estas reuniones se explicará el objetivo de la auditoría y las líneas generales de actuación durante su desarrollo. Auditorías internas y externas Las auditorías internas son las realizadas, con fines internos, por la organización o en su nombre. En cambio, las auditorías externas son las realizadas por entes que tienen interés en la organización o por organizaciones auditoras pendientes. Es requisito básico la independencia del auditor de las actividades auditadas. La credibilidad del auditor se basa en que sea, y sea visto, como objetivo e independiente. La credibilidad de los resultados de la auditoría no se tiene que ver comprometida. La independencia es particularmente crítica en la realización de auditorías internas. Es decir, de comprobación de la adecuación de un sistema de gestión ambiental respecto a una norma de referencia. Es preferible que auditores ajenos a la organización realicen estas auditorias. En cambio, las auditorías para evaluar la conformidad de las actividades realizadas en relación con la documentación del sistema sí pueden ser llevadas a cabo por auditores propios a la organización. Así no se ve comprometida la condición de independencia. Siempre y cuando esos auditores no estén implicados en las actividades objeto de auditoría. Asimismo, las auditorías internas son mucho más asequibles a todo tipo de empresas. Estas cuentan con la ventaja de un mayor conocimiento del proceso productivo por parte del personal auditor. Todo ello puede conducir a un reducido tiempo de realización. Y, como consecuencia, a la posibilidad de una elevada frecuencia, que acabará convirtiendo el sistema de auditorías en un medio habitual y rutinario de supervisión y mejora.

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